Tipos de comunicación no verbal
La comunicación humana, además de verbal y no verbal, la podemos clasificar desde otro punto de vista como oral y no oral. Dentro de los tipos de comunicación no verbal, la parte oral es la que estudia la paralingüística y la parte no oral se divide en kinésica y proxémica.
Aspectos propios de la comunicación corporal
La comunicación verbal y no verbal se complementan. Dentro de la no verbal, aparte de todo el lenguaje corporal que realizamos con los diversos gestos que empleamos en la comunicación, tenemos una serie de elementos añadidos.
Las mismas palabras, pronunciadas de una u otra manera, pueden captarse por parte del receptor de una manera completamente diferente. De tal forma que pedir “silencio” cambia mucho si se hace en un tono suave o autoritario.
Todos estos aspectos asociados a nuestro lenguaje corporal se estudian por distintas disciplinas que pasamos a detallar.
¿Qué es la comunicación no verbal paralingüística?
El paralenguaje estudia los aspectos asociados a las palabras emitidas. Transmiten una información adicional y que sirve para matizar, confirmar e incluso a veces oponerse al mensaje verbal.
Es, la paralingüística la ciencia que estudia las características no verbales que acompañan a nuestra voz y la modulan. Nos referimos a atributos específicos de la voz como son el tono, timbre, ritmo, y volumen.
Igualmente analiza los silencios que acompañan a la comunicación verbal. En definitiva, se centra no en lo que se dice sino en cómo se dice.
Cuando emitimos palabras, es decir, nos comunicamos de forma verbal, estas vienen acompañadas de un determinado tono y timbre de voz. Son emitidas a un volumen más o menos elevado, se pronuncia con mayor o menor velocidad, con interrupciones incluidas o no.
Todo ello depende del estado de ánimo del emisor o de lo que pretende transmitir y constituye lo que se denomina como comportamiento paralingüístico.
Veamos a continuación estos atributos de la voz humana.
¿Qué comunica nuestro tono de voz?
El tono de voz se regula mediante la tensión en las cuerdas vocales y tiene que ver con la frecuencia del sonido. Las cuerdas vocales más largas (hombres) producen voces más graves. En mujeres y niños las voces son más agudas debido a cuerdas vocales más cortas Se emplea para añadir sentimiento y emociones a nuestra expresión verbal.
Los tonos de voz graves sugieren autoridad y despierta confianza. Es por ello que, en los doblajes de películas al español, sea este el tono elegido para doblar a personajes que deben demostrar autoridad. También es el utilizado, por lo general, en los anuncios publicitarios. Piensa también en los locutores de radio, ¿qué tono tienen?
Sin embargo, los tonos de voz que se pasan de grave, pueden producir rechazo e incluso miedo.
Por el contrario, los tonos de voz muy agudos se perciben como propios de personas de poca autoridad y en grado extremo pueden resultar hasta cómicos.
Se puede conocer mucho de una persona dependiendo del tono de su voz. De hecho, incluso lo percibimos cuando el emisor habla en un idioma desconocido para nosotros, aunque no entendamos lo que dice, su tono nos puede mostrar energía o, todo lo contrario.
¿Qué es el ritmo en la comunicación oral?
El ritmo corresponde a la fluidez con la que una persona habla. Se puede expresar numéricamente como la cantidad de palabras por unidad de tiempo.
Como es casi todo, en el punto medio está lo correcto. Los expertos sitúan este equilibrio en el rango de 100 y 150 palabras por minuto o 2 cada segundo.
Cuando una persona habla a un ritmo por encima de las 200 palabras por minuto, se dice que es taquilálica (o que padecen de taquilalia) y corre el riesgo de que su receptor no llegue a comprenderla, bien porque la cantidad de palabras sea superior a las que puede asimilar o porque no sea capaz de vocalizarlas correctamente.
El caso contrario, la de esos conferenciantes que aburren a su público por hablar a un ritmo cansino, por debajo de 100 palabras al minuto. A estas personas se dicen que son bradilálicas (o que hablan con bradilalia)
Ahora que sabes esto, ponte a leer un texto durante un minuto a ver de qué tipo eres. Si estás fuera de rango de normalidad, toma cartas en el asunto para corregirlo. Este simple gesto mejorará tu comunicación no verbal.
El volumen en el paralenguaje
Esta característica de tu comunicación no verbal oral está asociada a la intensidad con la que hablamos o, dicho de otra manera, con los decibelios de nuestro discurso.
Aunque está asociada con otros rasgos, no confundir con tono o ritmo. Es como si eleváramos o bajáramos el volumen de nuestro televisor.
Un volumen de voz bajo está asociado a rasgos de timidez o melancolía. Un volumen normal significa autoconfianza y serenidad. Por el contrario, un volumen alto es señal de debilidad y poca capacidad de escucha. Piensa en las personas que tienen que chillar para hacerse oír.
¿Qué es el silencio en las comunicaciones no verbales?
Consisten en interrupciones que hacemos en nuestra comunicación verbal oral. Es una manera de decir algo sin mediar palabra. Piensa en tus tiempos escolares cuando el profesor dejaba de explicar la lección para acallar un murmullo molesto en clase. ¿Qué ocurría?
Además de para captar la atención, el silencio, unido a la falta de contacto visual indica poco interés sobre el tema del que te hablan. También es una preparación a la respuesta que vamos a dar, es como crear un poco de expectación. Piensa por ejemplo en una rueda de prensa, esos instantes en que el interrogado coloca el micrófono, corrige la postura… ¿no crees que genera expectación sobre lo que va a contestar a continuación?
Con pausas nos referimos a esas interrupciones en nuestro discurso con la intención de que nuestro interlocutor intervenga, responda a una pregunta, confirme que está comprendiendo…en definitiva, que intervenga en la conversación. Un ejemplo claro es la pausa que hace un comediante después de contar un chiste para que el público se ría.
Los silencios resultan muy molestos para la mayoría de las personas, tendiendo a romperlos y en ocasiones a dar más información de la que desearían a priori. Bien utilizados son una herramienta muy poderosa de la comunicación no verbal.
El timbre de voz
Es el registro característico de cada persona que hace de su voz perfectamente distinguible del resto.
El timbre nos permite distinguir la calidad de 2 voces de igual tono y mismo volumen emitidos por distintas personas.
Tipos de comunicación no verbal: kinésica
La kinesia o cinesia es la disciplina que estudia las posturas, gestos, expresión corporal…en la comunicación.
Ray Birdwhistell es considerado el pionero en la investigación de la comunicación no verbal kinésica, uno de los tipos de comunicación no verbal. Estudió la importancia en la comunicación de la expresión facial, los movimientos oculares o la postura propia.
Muchos gestos y expresiones son específicos de ámbitos geográficos y culturas, pero también existen los que son comunes a todos los humanos. Los primeros son aprendidos o transmitidos entre individuos, mientras que los otros se consideran innatos.
La kinesia es uno de los tipos de comunicaciones no verbales principales y analiza factores como:
Gestos
Que incluye todos los movimientos de rostro, extremidades, cabeza…y todo el cuerpo en su conjunto. La cara es capaz de expresar muchas emociones. Basta con mirar la cara de una persona para saber si su interlocutor es de su agrado antes de que intercambien una sola palabra.
Y es que con la cara podemos expresar las 7 emociones básicas: alegría, ira, tristeza, miedo, asco, desprecio y sorpresa. De hecho, seguro que has escuchado en muchas ocasiones “cara de…”
Dentro de las expresiones faciales la sonrisa ocupa un lugar predominante. Una sonrisa expresa alegría o agrado, dependiendo de su intensidad. También tenemos el ejemplo contrario, una sonrisa forzada o falsa indica que la persona frente a nosotros o la situación nos produce desagrado.
Tipos de comunicación no verbal: Posturas
Implican también las partes del cuerpo mencionadas, pero son situaciones más duraderas en el tiempo. Así por ejemplo la cara de sorpresa dura segundos, pero cruzar los brazos, las piernas…son más estables en el tiempo.
Las posturas también expresan la situación emocional de las personas y representan uno de los tipos de comunicación no verbal más potentes, porque podemos adivinar mucho acerca de los individuos sin necesidad de intercambiar una sola palabra y ni siquiera estar cerca.
Mover las extremidades de manera acelerada demuestra nerviosismo o inseguridad. Los movimientos pausados, todo lo contrario. La manera de sentarse en una silla, cómo se cruzan las piernas, si se cruzan los brazos…todo ello representa posturas que están emitiendo acerca de quién las adopta.
Ojos
Siendo probablemente la parte más expresiva de la cara, manifiestan los estados de ánimo del emisor. Las miradas también dicen mucho de cada uno, por ejemplo, quién no es capaz de mantenerla o quién mira de una manera intimidante.
La mirada tiene una labor fundamental en la comunicación. Sin establecer contacto visual es muy complicado mantener una conversación correcta. De hecho, no mirar a quién te habla denota desprecio o desinterés.
Po el lado contrario, mirar fijamente se puede percibir como intimidación o actitud hostil.
¿Existe una manera correcta de mirar? Como regla general podemos decir que depende de nuestro interlocutor. En una conversación profesional debemos mirar a la altura de los ojos. En una relación social, ya podemos mirar todo el rostro. Cuando se trata de una conversación con alguien de confianza, la mirada puede recorrer todo el cuerpo del interlocutor.
Ejemplos de lenguaje no verbal kinésico
Estamos seguros de que conoces la gran mayoría de ejemplos de lenguaje kinésico, así que te proponemos que leas la primera parte y antes de hacer lo propio con la segunda trates de adivinarlo.
Levantar la mano: según el contexto, en una clase o auditorio significa que deseamos hacer una pregunta o intervenir. Si lo hace un agente de la autoridad significa “pare”.
Encogerse de hombros: señal de indiferencia o ignorancia.
Llevarse el índice a los labios: se pide silencio.
Llevárselo a la sien: esta persona está loca.
Señalar el ojo propio ligeramente por debajo: presta atención, mira y aprende.
Pulgar hacia arriba: todo está correcto (en la mayoría de países).
Taparse o tocarse alrededor de la boca: señal de que se está mintiendo.
Rascarse la nariz: lo mismo que en el caso anterior.
Agachar la cabeza y rascársela: no lo tengo claro, dudo.
Brazos y piernas cruzadas: actitud defensiva.
Tragar saliva: demuestra que la persona no está cómoda con la situación
Pero si quieres conocer más casos, no te pierdas el artículo de ejemplos de comunicación no verbal.
Tipos de comunicación no verbal proxémica
La proxémica es la disciplina que estudia la relación espacial entre individuos durante la comunicación. Esta separación entre personas en su interacción está condicionada por circunstancias sociales y personales.
Como parte de los tipos de comunicación no verbal, no estudia las palabras emitidas entre interlocutores sino el manejo del espacio entre personas mientras se efectúa la comunicación verbal.
Todos nosotros tenemos un espacio alrededor nuestro que consideramos personal o íntimo. En nuestra comunicación, no nos sentimos a gusto si alguien invade ese espacio sin que nosotros lo permitamos. Las dimensiones d este espacio íntimo depende de diversos factores:
- La relación entre intervinientes: cuando mayor sea la relación entre las personas que se comunican menor será esta distancia íntima. Podemos hacernos una idea de esta relación entre 2 personas observándolas mientras conversan.
- La personalidad: las personas extrovertidas tienden a acercarse más que las tímidas
- La edad: la gente mayor tiende a mantener distancias mayores, mientras que los jóvenes, entre ellos, las acortan
- Motivos de la conversación: cuanto más relajada sea menor será la distancia, aunque las personas sean las mismas. No se respetará la misma distancia espacial con un compañero de trabajo en la oficina que fuera tomando una cerveza.
- Condicionantes culturales: cada cultura tiene establecida una distancia a la que se realiza la comunicación. Los japoneses y latinos tienen un espacio personal algo menor que los anglosajones.
Cuando 2 personas con diferentes percepciones del espacio personal conversan, puede llegar a producirse un movimiento curioso, la que acepta la menor distancia tiende a acercarse a su interlocutor, que a su vez intentará separarse hasta alcanzar la distancia con la que se siente a gusto.
Además de este comportamiento social, el lenguaje proxémico también se manifiesta en nuestro comportamiento como grupo dentro de un espacio más amplio que podríamos denominar territorio.
Ejemplos de lenguaje no verbal proxémico los tenemos en las distancias que guardamos en los espacios públicos, como una tienda o una cola del super, la posición que adoptamos en un ascensor o un vagón de metro.
Piensa en lo extraño que te resultaría que, en un andén casi vacío, alguien se te acercara demasiado sin intención de preguntarte algo. ¿Pensarías que quiere quitarte la cartera?
Si quieres saber más sobre espacio personal, no te pierdas el enlace.
Otros tipos de comunicación no verbal
Aparte de los mencionados tenemos otras disciplinas que estudian el lenguaje no verbal que cada día adquieren mayor relevancia.
Cronémica
Disciplina que estudia la organización que el emisor hace del tiempo durante su conversación. Aunque pueda confundirse, no es lo mismo que el ritmo, aquí se evalúan aspectos como lo conciso del mensaje o sus detalles.
Una persona que dispone de mucho tiempo tenderá a dar más detalles o vueltas para dar la información, mientras que alguien con prisa será mucho más conciso.
Está muy vinculada a las sociedades y a la importancia que le den al tiempo. Un ejemplo de cronémica sería la duración de un apretón de manos o de un abrazo.
Diacrítica o comportamiento diacrítico
Analiza la identidad del individuo o de un colectivo en base a los objetos o símbolos que utiliza para diferenciarse del resto, como puede ser el código de vestuario, símbolos, maquillaje…
Aunque es muy cierto que “el hábito no hace al monje” piensa en cómo te condiciona la imagen física de una persona. Con una estética determinada ya puedes determinar a qué “tribu” urbana pertenece y adivinar algunos rasgos de su comportamiento.
El aspecto exterior tiene importancia en la comunicación (al menos en la primera impresión). Es por ello, por lo que muchas empresas lo utilizan como imagen de marca. Las personas en contacto con el público deben tener un determinado aspecto que sea coherente con la imagen de la empresa que se quiere transmitir.
Te cuento una anécdota personal. Un amigo mío que trabaja en una firma de consultoría, (traje y corbata obligatorios) fue enviado para un proyecto a una empresa cuyo publico objetivo son los jóvenes. Entre las cláusulas del contrato había una que le obligaba a vestir con ropa “casual” y a llevar barba de 3 días. ¿Curioso verdad?
¿Habías pensado que la imagen personal es también uno de los tipos de comunicación no verbal? ¿Te inspiraría confianza un gimnasio en cuya recepción hay un señor mayor con sobrepeso vestido con corbata?
No lo olvides y conseguirás un lenguaje corporal coherente con tu mensaje verbal.
Redactor experto en temas de inteligencia emocional y comunicación no verbal. Sus más de 2 décadas de experiencia como reclutador o candidato ayudan para interpretar la influencia de lo anterior en un entorno laboral.